domingo, 31 de julio de 2011

Pepe Mel: "No queremos a los que no quieren estar en el Betis"

Emaná besando el escudo tras marcar un gol
La situación de Emana ha entrado en un túnel sin salida. El Betis ha rechazado la última propuesta del Al-Hilal, según algunas fuentes cifrada en 4,5 millones de euros, y sus máximos dirigentes, Miguel Guillén y Pepe Mel, instaron ayer al fútbolista desde la concentración de Portsmouth a que se incorporara de inmediato al equipo en tierras inglesas. «Lo que tiene que hacer Emana es venir, pedir perdón a sus compañeros, decir que quiere estar con nosotros y entrenarse. Para mí ahora es el último de la lista. No queremos a los que no quieren estar en el Betis. El club será firme con él. Nosotros defendemos los intereses de 40.000 abonados», señalaba Mel a los medios desplazados a Inglaterra. Minutos antes, Miguel Guillén había dejado claro que el club actuará en consecuencia: «Es un acto grave de indisciplina y será sancionado por ello. El Betis va a actuar con su código interno y no va a permitir que un jugador haga lo que le plazca, debe estar aquí con nosotros. Hemos esperado 24 horas de manera prudente para ver si tenía algún problema físico o de otra índole, pero no los hay y tiene que venir aquí. El club estudia la sanción que debe corresponderle al jugador, ya que el acto de indisciplina que ha cometido, además de evidente, es muy grave», sentenció el mandatario verdiblanco. Guillén confía en que el jugador pueda incorporarse a la concentración de Inglaterra, ya que en el caso de no hacerlo «el jugador seguiría infringiendo las normas del club y por tanto la correspondiente sanción podría ser mayor». El presidente declaró que espera que la situación «se solucione por el bien de todos. Esperamos que todo esto se solucione por el bien de todos, no estamos dispuestos a ceder a ningún tipo de presiones». Emana, mientras, continuaba en Sevilla y por la mañana se ejercitó en la ciudad deportiva verdiblanca sin que le llegaran los avisos por parte de la cúpula del club verdiblanco ya que no lograron ponerse en contacto con él.
El caso es que la negociación siguió viva hasta las 16.00, hora en la que el Al-Hilal había marcado su límite por los 4,5 millones que ha acabado ofreciendo. Al Betis seguían sin convencerle las formas y las garantías de pago, por lo que desechó finalmente la propuesta saudí. Emana seguía sin estar de acuerdo y su panorama no es muy alentador, por cuanto está declarado en rebeldía y, a no ser que cambie mucho la situación, no tiene equipo y le resta una temporada de contrato en el Betis. Desde muy temprano en el club tenían claro lo que iba a suceder, por cuanto Mel y Guillén hablaban con franqueza desde la ciudad deportiva del Portsmouth (Wellington Sports Ground), donde se ejercitó el equipo. La negativa del jugador a montarse en el avión y firmar la convocatoria en la que estaba incluido ha dolido mucho al club, que piensa en medidas realmente severas de índole económico para lanzar un mensaje al resto de la plantilla en esta situación de desobediencia.
Lo que está por ver es cómo se arregla la situación tras este pulso si el jugador no es vendido finalmente. Sus compañeros guardan silencio y han solicitado no hacer declaraciones en la prensa durante unas horas. Mel está realmente enojado con él y Guillén, también. Si el jugador cambia de postura hay que ver cómo lo reciben sus compañeros en la concentración. Su crédito ante la afición ha caído bastante por cuanto era un jugador muy querido pero esta actitud le ha reportado muchísimas críticas.

Un Saludo
Viva el Betis!

Fuente Texto: ABC de Sevilla

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